Silencio...
Abrumadora falta de ruido.
Te acomodas en el sofá, entre su hueco y el tuyo.
Silencio.
Tan sólo el viento, gritando tormenta.
Sólo silencio.
Ni tan siquiera, esa música taciturna de fondo,
logra aplacar el silencio.
Escúchalo, cierra los ojos y retenlo...
Aquello, que escuchas... sólo es silencio.